La ecuación es simple: con un ejercicio que sea difícil de trabajar, tu cuerpo necesita más energía para recuperarse y por lo tanto quemará más calorías.
Los ejercicios más recomendados para este proceso son:
• Intervalos de ejercicio de alta intensidad
• Spinning
• Entrenamientos con pesas
• Sprints
• Clase de aerobics intensa
Trata de incluir una sesión de alta intensidad un par de veces a la semana. Asegúrate de que el plan de días de descanso sea adecuado y, como siempre, escucha a tu cuerpo. Está bien exigirle un poco pero nunca cruzar la barrera del dolor.
-Samantha Clayton (Entrenadora en Gimnasia de Herbalife)
Carlos Sergio Raimundo
Asesor Personal de Bienestar y Control de Peso.